Un conclusión que se extrae de los últimos números de la Guía de Franquicias de España que viene editando la consultora Barbadillo y Asociados desde 1994
Según la Guía de Franquicias de España, editada por Barbadillo y Asociados y referencia para todos los interesados en el ámbito de la franquicia, un 65% de las marcas que operaban dentro del sistema de franquicia hace 10 años, continúan presentes en el mercado.
Esta cifra pone de manifiesto, no obstante, que el 35% restante han desaparecido a lo largo de estos años. Dentro de esta cifra (35%) no están contempladas las marcas que sí que continúan activas, pero que han decidido parar su expansión, bien por considerar que han completado dicho proceso y han llegado a un punto de madurez óptimo, o bien, porque han preferido continuar su expansión a través de otras fórmulas.
La Guía de Franquicias de España lleva almacenando datos informativos, técnicos y económicos de las centrales de franquicia desde 1994, y año a año ha ido actualizando estas cifras, gracias también a los datos recogidos en el portal quefranquicia.com al cual lleva vinculada desde el año 2001.
Según dichos registros, actualmente operan 1.410 redes, lo que supone un total de 68.148 establecimientos franquiciados. Hace 10 años, a cierre de 2007, el número de centrales era de 960, en tanto que el número de unidades franquiciadas llegaba a 53.974.
En este sentido y en palabras de Santiago Barbadillo, director general de Barbadillo y Asociados: “al tratarse de un período de 10 años en su mayoría además de profunda recesión, el dato del 65% resulta positivo; sin embargo, no debemos caer en el conformismo entendiendo que esas caídas suponen el coste lógico de operar en un mercado competitivo y en constante cambio, ya que no podemos obviar el hecho de que la caída de una marca arrastra, en no pocas ocasiones, a un buen número de franquiciados que apostaron por ella”.
Desde 2010, la franquicia ha arrojado cifras positivas al cierre de cada año, contabilizando un número de creación de redes superior al número de cierres, e invirtiendo la tendencia negativa de los primeros años de la recesión (2007 a 2009). “Por lo tanto, sin perder de vista el dato de cierres y velando para que el grueso de los proyectos puestos en marcha partan de un concepto de éxito probado y se sustenten sobre un buen diseño del proyecto de franquicia, podemos ser optimistas y considerar que estamos ante un sistema fuertemente consolidado y que continúa ofreciendo grandes garantías de éxito a aquellos que confían y emprenden dentro del mismo”, concluye Barbadillo.
